Dicen que hay que "renovarse o morir", así que hemos decidido "renovarnos" en este nuevo año que empieza ahora, y darle un nuevo aire al empaquetado de nuestros broches.
Al principio utilizábamos unas bolsitas de papel naranja en las que pintábamos a mano la carita de nuestra querida Tina, pero cuando los pedidos eran grandes, resultaba un verdadero suplicio pintarlas una a una; además, no se veían a simple vista los broches y para buscar uno en concreto había que asomarse al interior de la bolsa.
Así que estuvimos dándole vueltas a la cabecita para ver cómo podíamos solucionar estos "problemillas" y se nos ocurrió usar bolsitas de papel celofán para que se viera su contenido y realizar, con cartulina naranja, un cierre troquelado con nuestro logo y nombre (y en la parte trasera, nuestros datos de contacto).
Y el resultado final fue...
¿Qué os parece? Seguro que se puede mejorar aún más, así que seguiremos pensando como hacerlo... Se admiten sugerencias.